La Hacienda El Ada

Siglas de la Universidad de Puerto Rico en Utuado

(ubicadas en la entrada de la universidad)

Para los años 30 al 40 lo que hoy conocemos como la Universidad de Puerto Rico de Utuado no existía. Lo que podíamos encontrar en donde hoy es la universidad solo eran terrenos en donde se encontraba una hacienda conocida como Ada. Esta hacienda en un principio perteneció a los Cabreras. Los Cabreras eran españoles que llegaron de las Islas Canarias, fueron personas muy comprendedoras, trabajadoras, adinerados y con buenos valores. De acuerdo con mi entrevistada Catalina Cora, su padre fue uno de los administradores de esta hacienda. “Los Cabreras,” según Catalina Cora, “todas las tardes llamaban a sus trabajadores y estos se reunían en unas grandes escalinatas que se encontraban frente a la casa principal a dialogar y estos le hacían cuentos sobre lo que ellos habían vivido en un pasado.

La hacienda estaba compuesta por el hogar de los Cabreras y las casas de paja, bejucos, y madera que eran las de los trabajadores. Poseía una represa que fue construida por los Cabreras y luego, destruida al construir la universidad. Había grandes cañaverales, siembras de café y verduras, entre otras cosas. Esta hacienda estaba unida junto con la finca San Andrés, lo que hoy día conocemos como el cementerio San Andrés. La finca El Ada poseía sobre más de 60 cuerdas de terreno. Dentro de la hacienda había un tren de carga el cual llevaba toda la caña que producían hasta una central azucarera que estaba en lo que hoy día conocemos como Cabrera. Es decir que aunque solo tenían animales de carga, también tenían la manera de poder cargar todas sus cosechas de un lugar hacia otro en grandes cantidades con el fin de producir sus ganancias. Esta finca poseía una línea de demarcación natural con la hacienda que hoy día es de los Cora, mis entrevistados. Se trata de una muralla de piedras la cual tenía muchos petroglifos indígenas.

Luego, al pasar los años, esta hacienda fue rentada a un señor llamado Salvador Vives el cual tenía la hacienda con algunos asociados. Este señor logró que con la represa que había sido construida en la hacienda tuvieran agua potable. Según mi entrevistada el rio que bajaba y la cantidad de agua se podían comparar en aquellos momentos con el Rio Grande de Loiza. Cuando este hacendado toma las riendas de la finca se comenzó a darle más empeño al tabaco que fue uno de los principales cultivos en Puerto Rico. Luego hacen puentes de bueyes para la ayuda en la transportación dentro de las 69 cuerdas de terreno. Este hacendado luego se marchó de la hacienda y la retomaron los Cabreras.

Señaló: “Cuando los Cabreras retoman la hacienda comienzan a sembrar algunas verduras menores como maíz, ñame, yuca, entre otras cosas. Se asociaron con los Fabianes que eran españoles de familias adineradas y venian de las Islas Canarias. Se dice que esta finca, El Ada, tenia uno de los terrenos más prósperos en la producción de café, azúcar y verduras menores. Tenían una gran cantidad de ganado como vacas, toros, bueyes, etc. Mi entrevistada tiene conocimiento de que si hubo muchos artefactos indígenas en esos terrenos pero, muchos de estos artefactos están en posesión de la gente que construyó la universidad.